miércoles, 30 de junio de 2010

Historias para no dormir


Cuando era estudiante, uno de los aprendizajes que me resultó un poco traumático, fue descubrir que no existe la Historia, sino que en su lugar lo que hay son "historias". Que incluso los hechos más fehacientes del pasado son leídos e interpretados desde la perspectiva, habitualmente nada inocente, del historiador o aprendiz de tal que los investiga. Es una de esas "perdidas de inocencia" a que nos somete la vida. Desde entonces, después de conocer cualquier evento histórico por cualquier medio, la siguiente pregunta siempre es "¿de dónde viene, de qué visión, de qué presupuestos me llega esta información?", lo que hace que la tentación de dar por incontestable algo se diluya rápidamente.
Con Canal Historia me está pasando algo así. Tardé poco en darme cuenta de que cada documental o docu-serie, tiene detrás unos presupuestos, una visión, unos prejuicios que afectan al resultado que yo veo (como yo tengo los míos). Me fastidia cuando utilizan retazos mal contados de información para llegar a conclusiones aberrantes, aunque sea como divertimento, existe el riesgo de que un canal así promueva algún engaño en quienes crean que sólo habla de hechos contrastados e investigados según métodos serios.
Un ejemplo, el programa llamado "El efecto Nostradamus", un refrito de cosas para insinuar algo que no se acaba de saber si afirman o desmienten. Algo que se puede hacer, pero que no le pega a un canal que quiere ser serio. Tampoco los temas relacionados con la historia de las religiones da para echar cohetes. Suelen ser tópicos y previsibles, se saltan por alto detalles importantes para complacer a lo que creen que gusta a la audiencia.
Hoy vi un documental sobre el rey David de lo más sesgado e incompleto, con su propia interpretación completamente al margen de lo que las tradiciones judía y cristiana afirman. Para chulos ellos, anda.
En fin, para un canal que se deja ver, es demasiado políticamente correcto, con lo que ello supone, y eso lo desmerece. A pesar de eso, estoy enganchado. A ese y al canal... cocina.

miércoles, 16 de junio de 2010

CSI Miami

Bueno, CSI es una de esas series que suelo seguir. La verdad es que el amigo Grissom era un habitual de los lunes por la noche. Luego los equipos CSI se multiplicaron y el de Miami está al cargo del inefable Horatio Cane. Con el tiempo, el tal Horatio cada vez se parece más a Chuck Norris en tanto que no hay malo que se le resista ni acertijo que no pueda resolver, es humano, inteligente, llega el primero a la escena del crimen, saca a los que están en peligro de edificios en llamas, etc.
Pero Hoy no quería hablar de eso, sino de argumentos previsibles, un tema frecuente. En un episodio reciente comienza con una joyería donde un joven guapetón está comprando un anillo de pedida para su novia, es caro, duda, pero ¡está tan enamorado y se le nota tanto! De repente entran unos atracadores y yo pienso, verás como se cargan al joven del anillo y, efectivamente, en un par de escenas está muerto. Es tan previsible...

lunes, 14 de junio de 2010

Mentes criminales

Una serie que desde el principio me ha resultado estremecedora. No sé que mente enferma plantea los argumentos pero consigue revolverme el estómago. A pesar de eso la sigo viendo, cierto. Pero es de esas series que me lo pienso, me resulta desagradable no por las escenas, para eso están las autopsias de CSI a la hora de la cena, sino por la violencia moral, por el planteamiento de la bestia que anida en lo profundo del ser humano. 
Ya, ya sé que es ficción, pero lo verosímil del planteamiento me resulta terrible, me estaré volviendo más sensible con la edad.

miércoles, 9 de junio de 2010

House y los temas musicales

Entre las cosas que pueblan mi lado friki (uno lo es, o al menos comparte parte de las aficiones que definen al friki) está mi adicción a las series. En especial a las series de televisión americanas. Hoy he visto un par de episodios de "House". No voy a analizar los argumentos ni nada de eso, por lo menos en este artículo. Lo que me ha llamado la atención es un recurso cada vez más frecuente para crear intensidad dramática en la resolución de los episodios, que consiste en colocar un tema musical más o menos impactante. Músicas emotivas que arrancan ese estado de ánimo que dice que mereció la pena el esfuerzo, que todo va a ir bien o que los personajes están viviendo un momento de profundidad emocional muy intenso. Me he fijado que cada vez hay más series que incorporan ese recurso. No es nuevo, pero cada vez es más general. Otra serie que he visto cuando he podido y que se caracterizaba precisamente por eso es "Caso abierto", todos los episodios terminaban con una música bien elegida, hasta el punto que la gente preguntaba en los foros por el tema musical de uno u otro episodio en concreto.

En fin, disgresiones tardías.

(Este post lo publiqué, equivocadamente, como página asociada al blog principal, hasta que me di cuenta de cómo funcionaba el tema, lo traigo aquí que es su lugar).

Bienvenido

 Bueno, este blog asociado al principal es monográfico. Hace algún tiempo, con la aparición de la ADSL y los discos duros multimedia, tuve acceso a poder ver series de TV que siempre me gustaron y había perseguido por la parrilla de los canales sin mucho éxito. Este blog está aquí para poder comentar y hablar de eso, de las series de televisión que veo de vez en cuando, es un aspecto de mi lado más "friki", vale.
Un saludo.